Hace más de quince años, en una cocina familiar, comenzó la historia de La Magnolia. La señora Estela Salcedo empezó horneando pasteles para las reuniones familiares, llevada por el cariño y el deseo de crear momentos especiales para sus seres queridos. Con cada evento, su talento fue creciendo y, tras estudiar pastelería fina, Estela definió su propio estilo, lleno de sabor y autenticidad. Su habilidad y dedicación se convirtieron en un sello que rápidamente se difundió de boca en boca, llevándola a ser una de las pasteleras más queridas de Zacatecas y proveedora de importantes salones y hoteles.
La Magnolia se ha convertido en sinónimo de calidad artesanal, manteniendo su compromiso con el sabor y la tradición, a pesar de su crecimiento. Y en 2008, nació La Trufa como una extensión de esta pasión, creada para satisfacer los antojos de cada día. Con su delicioso pastel alemán, los irresistibles choux y el clásico pastel de zanahoria, La Trufa se enfoca en pasteles más pequeños pero igual de cautivadores, pensados para disfrutar en cualquier momento.
Hoy, La Magnolia se especializa en crear pasteles únicos para celebraciones memorables, desde bodas y quince años hasta eventos corporativos. Por su parte, La Trufa es el rincón perfecto para quienes buscan un delicioso pastel para una ocasión más pequeña, manteniendo siempre el mismo estándar de calidad. Ambas marcas están unidas por la misma misión: llevar a cada cliente la tradición y el sabor que han hecho famosa a la familia Salcedo en Zacatecas.
Con cada pastel que horneamos, cada sonrisa y cada momento compartido, nuestra historia sigue creciendo. Gracias por acompañarnos en este dulce camino; juntos, cada bocado es parte de una historia familiar que queremos compartir contigo.
